Sobre Disney, estereotipos y niños

Son el ejemplo con el que hemos crecido, con el que crecen los niños actuales y probablemente con el que crecerán los niños del futuro. Como prácticamente cualquiera, no sólo he crecido con Disney, sino que además me chiflaba cualquier cosa que esta factoría hiciera. No sé cómo no quemé las cintas en VHS de La Bella y la Bestia, Pocahontas, o El Rey León. Y confieso que todavía me gusta la animación, aunque ya veo pocas y, obviamente, no veo una y otra vez la misma película como antaño.

Al crecer y empezar a pensar un poco más en aquello que estas películas transmiten, muchas personas acaban odiando Disney y todo lo que tenga que ver con esta firma, procurando incluso que sus hijos no vean esas películas para que no ejerzan en ellos una mala influencia. ¿Tan horrible es?

Sé que todos tenemos bastante claro porqué se tacha de estereotipadas a las pelis de Disney, pero creo que es bueno reflexionar sobre ello y hacerlo explícito. Así que esta entrada será una pequeña recopilación de datos para hacer memoria, aunque al final se abordará el contacto de los niños con este tipo de películas de animación, y sugeriré algunas actividades al respecto.

Para empezar, lo que todo el mundo piensa cuando se habla de los estereotipos que Disney ayuda a extender por todo el planeta. El físico de la mayoría de sus personajes no representa para nada la realidad, no sólo entre las chicas sino tampoco entre los chicos. Los cuerpos femeninos son altamente «sexuales»: muy delgadas, grandes pechos, cinturas mínimas, irrisorias, y ojos extra grandes que les proporcionan expresiones seductoras.

princesas disney

En algunos casos, como el de Ariel o Jasmine, me da la sensación de que se van a romper por la cintura… y si se la comparamos con el cuello, que tampoco es que sea amplio, da que pensar…

Afortunadamente hay quien las ha intentado reparar recientemente. La ilustradora Loryn Brantz, horrorizada después de ver Frozen y comprobar que el prototipo físico de mujer no había cambiado desde los años 60, ha retocado a algunas de las princesas más representativas de Disney y les ha dado unas medidas más realistas, al menos respecto a la cintura. Y éste es el resultado:

ariel con cintura real

aurora con cintura real

Bella con cintura real

frozen con cintura real

jasmine con cintura real

pocahontas con cintura realMenuda diferencia, ¿no? ¿Acaso así están gordas?

Y lo mismo con los ojos. La mayoría de ellas los tienen enormes en proporción al resto de la cara. ¿Cómo serían con los ojos más pequeños?

ariel ojos pequeños bella ojos pequeños jasmin ojos pequeñosBueno, vale, creo que alguien se ha pasado un pelín… xD

Y lo peor de todo esto es que estas princesas con esos cuerpos tan exuberantes, que buscan a su príncipe azul… ¡son en realidad niñas!

edad princesas

14, 15, 16 años… y todas casadas y dispuestas a tener hijos

Pero los personajes masculinos no se quedan atrás: la mayoría están hipermusculados, tienen pechos exageradamente amplios y, bueno, en general muy marcados y fornidos. sólo hay que ver a Hércules, Kocoon de Pocahontas o al Capitán Li Shang de Mulán:

capitan li shang (mulan) Cokoum hercules

Es curioso cómo hoyy nos llama la atención el «Y soy más peludo que un oso polaaaar!!» de Gastón xD

Y cuando los personajes masculinos no son así, es porque son marginados o antipáticos… sólo hay que ver las diferencias físicas entre Gaston y Lafou en La Bella y la Bestia, y cómo trata el primero al segundo.

gaston lafou

Vale, igual precisamente en este momento no lo está tratando muy mal, pero ya me entendéis…

Todo esto del físico, enlaza con la que es para mí otra importante cuestión: los gustos sobre el sexo contrario. Además de lo físico, que es evidente que genera unas expectativas que prácticamente nadie puede igualar, a los hombres les gustan calladitas (¡literalmente!, y si no que se lo pregunten a Jafar), como objetos de placer (pensemos en Gastón again, que se marca a Bella como objetivo, casi como un trofeo de caza…) y para servirles. En esto último podemos poner como ejemplo la relación entre Wendy y Peter Pan:

«Girls talk too much…» Y mientras ella cosiéndole la sombra al zapato…

Por algo existen los síndromes de Peter Pan y de Wendy, como complementarios en ciertos tipos patológicos de relaciones de pareja. Echa un vistazo a sus características aquí o aquí, verás como resultan familiares.

Y La Bella y la Bestia parece hablar de que la belleza está en el interior, pero además de que esto sólo ocurre con los personajes masculinos, también se puede sacar la conclusión de que no importa cómo te trate un hombre, seguro que si te portas bien, eres sumisa y «te lo curras», por muy horrible que parezca el hombre, puedes esperar que acabe siendo un hombre maravilloso que te tratará como una reina. Cuánto peligro hay en estas expectativas, y cuánto recuerdan a tantas y tantas historias de maltratos.

En realidad, al principio las protagonistas femeninas eran bellas, dulces y sumisas, y luego empezaron a ser más rebeldes, pero casi siempre acaban renunciando a todo y haciendo sacrificios por amor. ¿No es esta una idea de amor y de relación de pareja equivocados? ¿Y no está muy extendida entre vuestros conocidos? A lo mejor estas películas han dejado más huella en nuestra forma de actuar y en nuestras expectativas de la que pensamos.

Racismo. ¿Racismo en Disney? ¿En serio?

¿Cuántos personajes principales negros ha tenido a lo largo de su historia? O fijémonos en los monos de El Libro de la Selva: su modo de cantar, de bailar, el ritmo jazz… todo recuerda a la raza negra, ¡y están hablando de que quieren ser humanos pero que nunca llegarán a serlo! Qué pena, una canción tan chula y pegadiza como «Quiero ser como tú»…

Pero Aladdín es una peli ambientada en territorio árabe… es un paso adelante. Claro, si no fuera porque los personajes principales son doblados con perfecto acento americano y son los mercaderes los únicos que hablan como árabes. Ah, y algún mercader se pasa de listo, porque le quiere cortar la mano a la princesa por robar una manzana. Bueno, si su cultura tiene esas cosas, habrá que enseñarlas… sólo que en realidad esto va contra el Islam, religión que obliga a alimentar a quien esté hambriento. Únicamente en Arabia Saudita, sólo uno de los muchos países de mayoría musulmana, el robo está penado con este tipo de penitencia. Eso sí, después de 3 avisos y otras 3 condenas. Sospechoso lo de este mercader de Aladdín…

No he encontrado un vídeo mejor… minuto 1:20

Y la preciosa (y delgada) Pocahontas, que nos enseña a amar la naturaleza… Pocahontas está basada en hechos reales: la niña tenía sólo 10 años en aquella época, Smith entabló amistad con ella, sin ningún tipo de romance, y al final de la película los colonos y los nativos hacen las paces y viven felices para siempre, cuando en realidad el 90% de los nativos fueron aniquilados por enfermedades y el genocidio a manos de los colonos. ¿Por qué? Por religión. ¿Maquillando la historia con una bonita película?

Y qué decir del comportamiento abiertamente sexista de muchos de los personajes de esta gran factoría. Como características generales podemos apuntar que por muy fuerte y decidida que sea una mujer, siempre tiene que ser rescatada por un hombre. Por otro lado, el personaje malvado, sobre todo en los clásicos, suele ser una mujer, y además suele moverse por la envidia, por lo general provocando un conflicto con otra mujer, de manera que se perpetua la extendida creencia de que las mujeres son muy malas las unas con las otras. Suele ocurrir que no exista una figura materna, y que cuando se haga referencia a ella sea una madrastra mala. Entre los varones, negarse a pelear se toma como símbolo de cobardía, ¡se ve como algo de lo que avergonzarse! Y por supuesto, se repite la lucha entre hombres por el amor de una mujer, ¡como si ella no tuviera nada que decir al respecto!

Hagamos un pequeño recorrido por algunas de las pelis que más nos han gustado de pequeños, pero con una perspectiva más adulta.

Blancanieves tiene, cómo no, una madrastra, la malvada de la peli, que, «como cualquier mujer» portada blancanievestiene envida de la belleza de Blancanieves, y por eso quiere matarla. Muy lógico, ¿a quién no se le ha pasado por la cabeza asesinar a su hijastra por ser tan guapa? Además, los enanitos, como buenos anfitriones, la aceptan en su hogar (porque necesita protección masculina) a cambio de hacerse cargo de las tareas domésticas, adoptando el papel de madre, como es propio de la perfecta mujer. Pero es que además lo ofrece ella misma («si dejáis que me quede, os limpiaré la casa, fregaré, coseré y también cocinaré» dice exactamente, muy orgullosa), y no sólo eso sino que antes siquiera de conocerles les limpia y ordena la casa, que como cualquier hombre, la tienen hecha una pocilga. Y luego queremos que los hombres se hagan cargo de las tareas domésticas en casa… Y finalmente es salvada de su penosa vida de solterona (¿puede haber algo peor?) por un hombre, gracias a un beso sin consentimiento. ¡Y nosotros procurando que los niños y niñas sean dueños de su propio cuerpo y por supuesto sus propios besos! Qué ocurrencias… Pero sí, esto último es más serio de lo que parece.

portada cenicienta

Cenicienta es una mujer sumisa y trabajadora. Pero no trabaja dignamente por un sueldo sino que es una esclava. Y volvemos a ver el papel de la madrastra como la malvada, causa de su sufrimiento. La pobre Cenicienta quiere, con todas sus fuerzas, asistir a un baile de mujeres florero que dan en palacio, y por supuesto, el príncipe se enamora de su belleza (¿qué más sabe de ella? Pero es más que suficiente, para qué otra cosa va a servir una mujer salvo para lucirla…) y finalmente la salva de su cautiverio. Necesitaba un hombre para ello, para ser feliz.

portada sirenita

En La Sirenita, la malvada vuelve a ser una mujer, Úrsula, que nos da una gran lección a todas las mujeres sobre lo que debemos hacer si queremos que los hombres se fijen en nosotras: «Los hombres no te buscan si les hablas, no creo que les quieras aburrir. Allí arriba es preferible que las damas no conversen, a no ser que no te quieras divertir. Verás que no logras nada conversando, a menos que los pienses ahuyentar. Admirada tú serás, si callada siempre estás. Sujeta bien tu lengua y triunfarás». ¡Ole! Por supuesto, Ariel se da cuenta de que callada está más guapa y da su voz a cambio de unas piernas, porque lo que importa es la belleza.  Y finalmente, ¿por qué no?, lo abandona todo por irse con su príncipe. Muy bonito y educativo todo.

En La Bella y la Bestia, tenemos al fornido y apuesto Gastón, que es el prototipo de hombre ideal para todas las mujeres, puesto que no sólo es enorme y musculoso, como dijimos anteriormente, sino que portada bella-y-bestiaademás es bestia y violento. Y lo malo es que no es mentira que las mujeres en general nos sentimos atraídas hacia este tipo de hombre, y si no que se lo digan a todos los machitos triunfadores de las películas. Siempre odié a este personaje, y sobre todo a las 3 mujeres que parecían gemelas y que vestían igual pero de diferentes colores y que se pasaban la vida suspirando por él… ¡Pero a Bella no le gusta! ¿Es porque lee y por tanto es lista y culta? No, Bella no es culta por leer libros, jamás se la muestra así: «El pueblo entero lo comenta: no está bien que una mujer empiece a tener ideas y a pensar», ¡ufff! Es más bien es rara por gustarle tanto leer… y porque no le gusta Gastón. ¡Pero si es un partidazo!   Y la Bestia le hace mucho daño (le grita, la encierra, la separa de su padre y además de muy malas maneras…), y aún así se acaba enamorando de él. Como dije antes, peligrosísimo. Por cierto, siempre me llamó la atención el comienzo de la canción de Gastón en la taberna: «-Ya llevo un buen rato pensando… +Es muy peligroso… -Lo sé...». Cuanto menos, curioso.

aladdin portada

En Aladdín, además de lo ya comentado, Jasmine no quiere casarse con ninguno de los pretendientes que le presenta su padre (es su único papel político en una monarquía absolutista como mujer). Es rebelde a este tipo de tradición de casarse con quien diga papá, pero no tiene reparos en enamorarse de un perfecto desconocido que se hace pasar por quien no es. Además, como buena niña de 15 años sabe utilizar su cuerpo para distraer a Jafar, además de admirar para ello lo retorcido que es el personaje malvado, como muestra de lo que les gusta a las mujeres de los hombres.

jorobado portada

En El Jorobado de Notre Dame, Esmeralda es al principio una heroína femenina muy autosuficiente. Tiene grandes aptitudes físicas, y de hecho derrota con la espada al capitán Febo; y mucho carácter, por ejemplo desafiando a la autoridad por defender a Quasi. Sin embargo a lo largo de la peli pierde esa autosuficiencia y finalmente tiene que ser salvada por un hombre. Esa rebeldía inicial se ve sustituida por sumisión e incluso seducción. ¡Una auténtica pena! Y no contentos con eso, desde Disney deciden que aunque Quasi la ha salvado y lo ha dado todo por ella, mejor la acaban casando con Febo, que tienen que salir hijos guapos y rubios, si puede ser sin rastro de su ascendencia gitana, claro.

Pero aquí viene Mulan para sacarnos de este agujero de estereotipos sexista en el que nos hemos metido.

Mulan portada

¿O no?

Lo primero que Mulán ha de demostrar para aparentar ser un hombre y poder seguir en el ejército es su fuerza y sus habilidades físicas, porque los hombres no pueden ser flojuchos, ¡sería una deshonra! Y por supuesto, al principio desea combatir en el ejército por causas que para su cultura podríamos llamar «nobles», pero finalmente su objetivo ¿no es un hombre? Así que al final resulta acabar como la perfecta casada sumisa que su familia anhelaba, y por supuesto con un tío de bandera. Menudo timo… Ah, y durante el tiempo que pasa con sus compañeros del ejército se canta una preciosa canción en la que todos hablan de cómo les gustan las mujeres:

Parece muy inocente, e incluso alguno dice cosas tan bonitas como «Da igual cómo pueda ser o cómo vista«, aunque lo acaba rematando con un «pero al guisar que sea una artista«. Mi momento favorito.

Y luego vino Pixar. Venerado Pixar. Es cierto que a partir de la compra de Pixar, las películas que hicieron juntos empezaron a cambiar un poco. Ya no era todo tan exageradamente machista, no hay malvadas mujeres, la fealdad no se presenta como algo tan horrible, las chicas ya no son tan delgadas y sexuales… un momento, ¿las chicas? ¿Qué chicas?

Toy Story, Bichos, Monstruos S.A, Buscando a Nemo, Los increíbles, Cars, Ratatouille, Wall·E, Up… Desde luego son películas mucho más actuales y menos estereotipadas, pero ¡ni un personaje femenino como protagonista! ¡En 16 años! Y ¿cuántos coches femeninos hay en Cars? Ah, que los coches no son para las mujeres… Y ¿cuántas mujeres trabajan en la fábrica de sustos de Monstruos S.A.? Sólo 2: una es un poco malvada, y la otra ocupa un puesto bastante inferior y además tiene que ser seducida por Mike. Efectivamente, que haya menos estereotipos, no les salva de «la quema».

cars

Afortunadamente, llego Brave. Aunque sigue siendo una princesa a quien sus padres quieren casar con un desconocido, físicamente es una niña sin medidas imposibles y el pelo rizado e indomable, como ella misma. Ella sí que rompe finalmente con la tradición patriarcal al negarse a contraer matrimonio con uno de los herederos de los otros clanes dominantes, y se posiciona firmemente contra el ideal de mujer – esposa – madre dedicada solamente a la función reproductiva. Mérida muestra una gran valentía durante toda la película, y sus habilidades con el arco y su valentía no decaen para ser finalmente salvada por ningún hombre. Pero es que además hay personajes femeninos diferentes, como la bruja, que no es mala sino adorable y divertida. Y qué decir de cómo se retrata la relación madre – hija. Nada que ver con todo lo anterior.

Sin embargo, se ha hablado mucho de si Mérida es lesbiana (¡pero si es una niña! ¿A qué jugamos?), y Disney ha intentado «sexualizar» el personaje a posteriori con una cintura más estrecha, los hombros al descubierto, y una suavización de rasgos, incluida su indómita melena que tanto la caracteriza.

brave antes y despues

¿¿¿Por qué???

Afortunadamente, Disney tuvo que retirar esta imagen de Mérida ante las miles de protestas que recibieron.

Evidente, salvo esta exquisita excepción, podemos decir con todas las letras y la cabeza bien alta que las películas de Disney no reflejan la realidad. Disney no busca más allá del dinero, y no lo niega en ningún momento, aunque somos muchos los que opinamos que cuando tienes tanto poder sobre los niños de todo el mundo, esta influencia debería venir acompañada de cierta responsabilidad, y tratar de hacer compatible la búsqueda de pasta con la de una fiel representación de la realidad que no caiga en estereotipos y los perpetúe.

Dicho esto, ¿debemos prohibir el visionado de pelis Disney a los niños y niñas? 

Yo no soy partidaria de prohibir demasiadas cosas, creo que no es la mejor forma de educar (ojo, tanto a niños como a toda una sociedad). Las pelis Disney les encantan tanto a los niños como a las niñas, y cuando pienso en estas cosas aparece un cartel enorme y parpadeante en mi cabeza con la palabra MOTIVACIÓN. Sólo hay que buscar la manera de aprovechar este material. Y si el material es pobremente educativo, pues a lo mejor lo que tenemos que hacer es tomarlo como ejemplos de lo que no es correcto.

Es decir, no se trata de ponerles las películas sin más, sino de analizarlas posteriormente, y además de realizar ejercicios de memoria para contar el argumento y cosas parecidas que son más habituales en las aulas, también podemos analizar las películas respecto a todos los estereotipos que hemos mencionado. Si se hace con un par de películas, estoy segura que a la tercera ya le sacan «pegas» mientras estén disfrutándola. ¿Por qué eliminar lo que tiene poca calidad y no analizarlo para no volver a «caer en su trampa»?.

Personalmente optaría por realizar debates y no dar las repuestas correctas. Si el análisis viene de ellos, será un aprendizaje más personal y significativo. Puede parecer difícil hacer una cosa así en infantil, pero se pueden realizar preguntas sencillas que les hagan pensar en ciertas cuestiones. De ahí a aplicarlo en la vida diaria hay un paso ;)

Además, se puede acompañar de otras actividades. Podríamos utilizar, entre otros muchos ejemplos, el libro ilustrado «¿Hay algo más aburrido que ser una princesa rosa?«:

O también algo como «Viejos cuentos, nuevos finales«:

¿Y por qué no realizar nosotros mismos nuestro propio cuento moderno y sin estereotipos? Una actividad ultracreativa.

Por último, propongo también una búsqueda de nuevos iconos a los que admirar además de las princesas Disney. Científicas, mujeres que han luchado por los derechos de todas las mujeres, deportistas… esta mamá fotógrafa lo tiene muy claro, ¿por qué no recoger el relevo en las aulas?

 

En definitiva, lo que quiero buscar en mi práctica docente es la enseñanza sin mentiras y con el menor número de prohibiciones posible. Es difícil, y asegura cantidades ingentes de trabajo, pero de esta manera confiamos en las posibilidades de los niños, que son muchas, y además creo que es mucho más enriquecedor (para todos) y sobre todo justo.

VIVA DISNEY

Jijijijii…

8 pensamientos en “Sobre Disney, estereotipos y niños

  1. Totalmente de acuerdo. Los productos Disney tienen unas connotaciones tanto de género, como de ideología muy neoconservadora. Además de todo lo que has mencionado, ¿Porqué en las películas disney la felicidad viene asociada con mejorar la posición social? La familia perfecta, el amor perfecto ha de ser con un principe rico. No hay posibilidad de introducir cambios sociales. En Frozen, al principe Hans tanto Ana como Elsa le dejan el gobierno del reino sin conocerlo, ahora a Kristoff que es quien nos ayuda le regalamos «Un trineo de nieve nuevo». Todo producto audiovisual tiene mensajes, diferentes capas de lectura, y los niños solos no pueden asumirlas. No son un mero divertimento, padres y educadores hemos de ser conscientes de que Disney es una empresa, con un objetivo económico, pero en este caso también Ideológico.

  2. Pingback: 1 año de Entre Actividades Infantiles | Entre Actividades Infantiles

  3. Me ha gustado mucho la entrada, pero ya que nos ponemos a hablar de machismo, patriarcado e intentamos educar a los niños y niñas de nuestra sociedad, te sugiero que incluyas a tus entradas un lenguaje inclusivo y no uses el masculino genérico, pues entra en contradicción con lo que pretendes transmitir. Así, la entrada podría titularse Sobre Disney, estereotipos e infancia, de esta manera no excluyes a la mitad de la población femenina. Un saludo.

  4. Hola, angcase, no uso el lenguaje inclusivo a conciencia. No es un tema que me preocupe en absoluto, porque lo encuentro tanto farragoso como sin sentido. En mi humilde opinión, creo que hay otras muchas cosas que intentar cambiar de este mundo sexista que son mucho más importantes, y de hecho siempre he pensado que el debate sobre la lengua hace que los feministas parezcamos (puede que lo seamos) exagerados, algo que no nos beneficia en absoluto. Así que no creo que el uso del masculino genérico entre en contradicción con lo que digo, porque está todo bastante pensado. Eso sí, pido disculpas si hiero la sensibilidad de alguien, pues nunca es mi intención. Un saludo.

  5. Disfruto leyendo tu blog, Seño Punk, me ayudas muchísimo a enseñar a mis hijas a gozar de lectura, ¡muchas gracias!
    Muy interesante la entrada y, especialmente, las referencias sobre el contenido visual de las películas. Por otro lado, creo que deberíamos recordar que la mayoría de los dibujos están basados en los cuentos escritos hace siglos, cuando los roles sociales no tenían nada que ver con los de hoy en día. Con lo cual, los estereotipos de la protagonista, la madrastra, los personajes masculinos, etc. no son de Disney, sino de los hermanos Grimm, Perrot o Andersen. Y a pesar de que sus cuentos a alguien le puedan parecer sexistas, no dejan de ser obras maestras de la literatura infantil.
    Por otro lado, estoy totalmente de acuerdo en que, con la llegada de Pixar, los guionistas del siglo 21 podrían haber actualizado más a los personajes. Es genial tu propuesta de animar a los niños a que analicen a los personajes, sin duda sería una actividad beneficiosa para el desarrollo de pensamiento crítico en los alumnos.

  6. Tienes mucha razón, Joanna, y es cierto que últimamente ya empieza a cuidarse algo más estos roles de género en el cine. Queda mucho camino por recorrer pero parece que vamos en la dirección correcta. :)

  7. Pingback: LO QUE NO SABÍAS SOBRE LAS PELÍCULAS DE TU INFANCIA – YMCA Animación Sociocultural

  8. Hola! No solo estoy de acuerdo con Joanna, sino que nos olvidamos que las peores referencias descritas en el texto son películas hechas en los 60 y 70, por americanos! Gente puritana que nos quiere vender su prototipo de perfección. Brave, que es lo que se salva por lo visto, está hecha en la actualidad por un estudio europeo. Hay que relativizarlo todo y charlarlo con los niños, estoy de acuerdo, pero no solo lo visto de Disney, sino todo lo previo a esta efervescencia de lucha de poderes.

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